Desde la última vez que escribí, mi operación pasó de enero a finales de febrero, casi marzo. La gastroscopia mostró una úlcera pequeña pero en mal sitio y tengo que esperar a que se cure. Llevo quince días con omeprazol que no acaba de sentarme bien, pero que espero que cumpla su función. Por otro lado no tomo antiinflamatorios y, al principio, lo pasé fatal pero ahora ya no tengo tantos dolores. No sé, cuando vuelva a trabajar, cómo estaré. Cuando empezaron las vacaciones pensé que se me iban a hacer largas y ya estoy deseando que duraran algo más. Tengo ganas de hacer cosas pero tengo que posponerlas y priorizar lo que toca. Tengo pilas de ropa acumuladas por todos lados, no las guardo porque tendría que empezar a tirarla puesto que si no la uso ahora y en un año no me valdrá no tiene sentido guardarla. Pero así mi casa parece una parada de mercadillo desordenada. Luego tengo las discusiones en bucle de siempre. Cada vez que me viene alguien explicando que otra persona es tóxica...
Ansiedad... pero no por motivos personales ni siquiera laborales, sino por una endoscopia que me hacen mañana. Me sedarán pero he de ir acompañada, cosa que iba a saltarme, pero ya me dijeron que si no iba acompañada no me la harían, así que tuve que pedírselo a mis padres. Mientras tanto este jueves se cayeron por unas escaleras automáticas y mi madre se golpeó en la cabeza y tras pasar bastantes horas en urgencias pues mañana mi madre tiene también traumatólogo en el mismo centro. Así que no sólo tengo un plus de ansiedad por tener que ir acompañada sino que tengo otro por el papeleo que me tocará mañana por ir al trauma con mi madre, puesto que es la primera vez que va y hay que informatizar sus datos. Así que trauma, endoscopia, esperar a que se pase la anestesia, de vuelta a casa, un ratito allí y luego pues a trabajar. Tengo las tardes contadas así que no puedo faltar... Por ahora todas las pruebas indican que estoy sana como una manzana (sana) y que mis órganos internos no ti...